Curso drenaje linfático en Barcelona

Cómo hacer un drenaje linfático. La técnica por presión y la técnica brasileña

La acumulación de líquido linfático es un problema común. Muchos usuarios de nuestra clínica de estética avanzada acuden a nosotros buscando solución a su hinchazón, incomodidad y sobre peso. Sabemos que, probablemente a ti, te ocurra lo mismo.

Por eso este artículo lo hemos querido dedicar a cómo hacer un drenaje linfático, basándonos en la técnica de la presión y contándote las diferencias con la, cada vez más popular, técnica brasileña.

Índice de contenidos

Qué es un drenaje linfático

El drenaje linfático es una técnica de masaje enfocada en la eliminación del líquido acumulado. El objetivo de este masaje es mejorar la circulación del sistema linfático.

¿Qué es en concreto este sistema? Se trata de un sistema de vasos que cumple la función de trasladar los desechos generados a través del proceso de nutrición en la linfa. Este es el nombre que recibe el líquido que circula por dicho sistema.

Gracias a las técnicas de masaje (por presión y brasileño) podemos ayudar a nuestros clientes sin técnicas invasivas ni medicación a eliminar los excesos de este líquido que son molestos, no solo a nivel estético, sino que provocan pesadez en las piernas y derivan en otros problemas de salud.

Por qué se acumula líquido en los tejidos

Es importante que entendamos que nuestro papel no es el de un médico que presenta un diagnóstico. Pero sí es interesante que conozcamos las posibles causas del mal funcionamiento del sistema linfático. Sobre todo para que comprendamos hasta qué punto podemos ayudar a nuestros clientes.

Algunas de las causas por las que se acumula líquido en los tejidos son:

  • Problemas de malnutrición y alimentación inadecuada.
  • Problemas circulatorios.
  • Estados hormonales, como el embarazo, la menstruación o la menopausia.
  • El exceso de peso.
  • Edemas venosos y/o traumáticos.

Este problema causa diversos malestares como el hinchazón y pesadez en piernas y tobillos e hinchazón abdominal.

Por eso, si nuestro trabajo puede suponer un alivio físico y emocional a nuestros clientes, es muy importante que aprendas todo sobre cómo hacer un drenaje linfático correctamente.

Cómo hacer un drenaje linfático por la técnica por presión

La técnica tradicional para realizar un drenaje linfático consiste en ejercer presión en ciertos puntos.

Mediante un masaje suave cuyo objetivo es presionar puntos clave, ayudamos a arrastrar los líquidos retenidos hacia el sistema circulatorio y la sangre.

Esto lo hacemos con los ganglios linfáticos, estructuras que se encuentran en varias zonas del sistema y que actúan depurando los agentes patógenos y neutralizando los daños que puedan ocasionar.

Este tipo de tratamiento es un masaje ligero que, mediante la presión de puntos concretos, da salida al líquido de la zona donde se ha ido acumulando, hacia un lugar de desagüe a través de un sistema de conducción.

Vamos a hacerte un resumen de cómo llevar a cabo esta técnica en cuerpo completo con tus clientes

Paso 1. Estimula el sistema linfático.

Antes de comenzar con las técnicas de presión, debes estimular el sistema linfático con maniobras que vayan encaminadas al vaciamiento de los ganglios linfáticos, situados en la ingle y en la región supraclavicular. Además, deberás repetirlas a lo largo del masaje. 

Paso 2. Comienza el drenaje linfático facial.

Concéntrate primero en el cuello realizando masajes circulares en la parte lateral del mismo y también en la zona de la nuca. Después, sube a la zona de la cara iniciando el drenaje alrededor de la boca.

Paso 3. Continúa en brazos y manos

Primero, estimula la región de las axilas con masajes circulares en series de 4 – 5 círculos. Continúa desde la muñeca hasta el codo y llega poco a poco a la base de los dedos con esos movimientos circulares.

El drenaje de esta área termina con el estímulo de los ganglios axilares.

Paso 4. Tórax y mamas.

Continúa estimulando los ganglios de la región supraclavicular y axilar con movimientos circulares y de bombeo. Luego, ve a la región bajo la mama, que ha de ser drenada en dirección a la axila.

Sigue por la región del centro del tórax.

Paso 5. La zona del abdomen.

Para tratar esta zona, haz presión con la parte lateral de la mano alrededor del ombligo en dirección a la cresta ilíaca y después a la región inguinal. Haz los movimientos de arriba hacia abajo. 

Paso 6. Piernas y pies.

Después de estimular la región inguinal, se estimula la zona de los muslos haciendo deslizamientos desde el medio de estos hasta los ganglios.

Su zona interior se drena en dirección a los genitales.

Las zonas de rodillas y tobillos deben ser presionadas también para lograr resultados.

Paso 7. Espalda y glúteos.

Acaba el masaje drenante en esta zona. La parte de en medio de la espalda se drena en dirección a la axila; la región lumbar y la superior y media del glúteo en dirección a la región inguinal y la parte inferior de los glúteos hacia los genitales.

Es importante que, después del masaje, tu cliente permanezca acostado y en reposo entre 5 y 10 minutos, para que el tratamiento haga todo su efecto.

La diferencia con la técnica brasileña

Ahora, te contamos cómo hacer un drenaje linfático con la técnica brasileña.

Esta técnica es actualmente muy demandada por sus visibles resultados para eliminar líquidos retenidos, reducir molestias físicas, eliminar grasa localizada y moldear el cuerpo.

La técnica brasileña de drenaje linfático fusiona distintos métodos de los masajes moldeadoras, técnicas reductoras y drenaje linfático manual, haciendo una mezcla perfecta con gran eficacia.

Y ese es justamente su secreto: la combinación de distintas técnicas. Su objetivo principal no es solo el de mejorar el organismo y eliminar desechos, sino que se tiene en cuenta también el objetivo de moldear la figura.

Hay una explicación para la popularidad que está alcanzando este masaje: los resultados pueden observarse tras solo un único masaje, ya que tiene un efecto antiinflamatorio muy potente fácilmente visible.

Beneficios del drenaje linfático

¿Tiene realmente beneficios el drenaje linfático?

Ya te lo hemos estado desvelando a lo largo de todo el artículo: los masajes linfáticos, ya utilices la técnica de presión o el método brasileño, tiene muchos beneficios.

Es importante que los tengas presentes para poder aconsejarle a tus clientes adecuadamente y que sepan todo lo que pueden conseguir gracias a esta práctica: 

  • Elasticidad en la piel
  • El metabolismo actúa a más velocidad
  • Mejora la circulación sanguínea
  • Mejora la inflamación
  • Favorece la pérdida de peso
  • Ayudamos a mejorar los desequilibrios hormonales
  • Desintoxicación del cuerpo
  • Reduce la apariencia de celulitis
  • Remodela el cuerpo
  • Aportamos relajación y bienestar corporal
  • Elimina toxinas 
  • Regula los líquidos del organismo.
  • Aumenta las defensas.
  • Mejora de la circulación linfática y sistema renal.

Normaliza el flujo de la linfa reduciendo edema e inflamaciones.

Dónde aprender drenaje linfático

En Alisa Beauty Academy puedes especializarte en masaje linfático tanto en técnicas por presión como en el método brasileño.

Además, te facilitamos que escojas el método de aprendizaje más adecuado para ti. Puedes cursar con nosotras esta formación online aquí, o echar un vistazo a nuestras formaciones presenciales en Barcelona. 

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Patricia

Patricia

Especialista en protocolos estéticos